Droga, dinero, celulares y armas, el combo completo incautado de posibles miembros del Clan Rotela en los aledaños de Asunción. La merca estaba destinada a proveer el veneno a unos 20.000 adictos, según la Senad.
Una vivienda del barrio Villa Bonita de la ciudad de Villa Elisa, que según evidencias era utilizada como centro de operaciones del sanguinario Clan Rotela, fue intervenida en un despliegue operativo con resultados importantes en la lucha contra el tráfico de droga, en este caso al menudeo, indica un informe de la Senad.
En la vivienda en cuestión, administrado por dos operadores de la organización, fueron incautadas miles de dosis de chespi y cientos de cocaína.
El volumen de lo decomisado representa un golpe bajo para el negocio de la droga, teniendo en cuenta el caudal de sustancias ilícitas que salían del lugar hacia los focos de consumo, así como también el flujo de dinero que alimentaba a la estructura, señala Senad.
Añade que, bajo las órdenes del Clan Rotela, sospechosos identificados como Néstor Rubén Suarez Ruiz Díaz, de nacionalidad paraguaya, y Darío Julio Larrea, de nacionalidad argentina, debían inyectar miles de dosis de cocaína y crack a una extensa red de focos de distribución instalados en varios departamentos del país.
Los intervinientes, encabezados por el fiscal Lorenzo Lezcano, realizaron el operativo en el momento en que las drogas todavía no salieron del centro de acopio, por lo cual la incursión logro resultados positivos como la aprehensión de los supuestos narcos y las cargas ilícitas.
Entre los elementos incautados se encuentran, 19.860 dosis de chespi y 221 dosis de cocaína.
De acuerdo con las investigaciones, el respaldo financiero, logístico y de seguridad por parte de la estructura para con los traficantes externos era plena.
Los intervinientes decomisaron igualmente unos 20.000 dólares y más de 2 millones de guaraníes, que engloban los recursos tanto para la compra de drogas como las ganancias obtenidas.
Otra evidencia incautada correspondió a una camioneta de la marca Toyota, según la Senad, que alude al Clan Rotela señalando que esta organización criminal de origen brasileño con profunda raigambre en territorio paraguayo busca permanentemente engrosar sus recursos, pero los operativos antinarcóticos representan un duro revés al circuito de distribución y como soporte financiero que mantiene con vida saludable a la organización.