A pesar de que la Ley Electoral no autoriza, el TSJE podría abrir todos los Sobres que sean necesarios para demostrar la transparencia del proceso, informó el asesor Carlos María Ljubetic.
Imposibilitados de asimilar la derrota en las elecciones del pasado domingo, partidos y movimientos políticos y sociales armaron un frente común contra lo que consideran “fraude” en el conteo de votos que le dio una victoria aplastante al Partido Colorado y arrojó cifras humillantes para toda la oposición, que perdió no solo la oportunidad histórica de ungir presidente de la República sino perdió escaños importantes en el Congreso Nacional, además de gobernaciones de Departamentos considerados bastiones anticolorados, especialmente liberales efrainistas.
Los primeros en tirar combustible al fuego pos-eleccionario han sido los seguidores del ex candidato presidencial por la Lista 911 quienes, envalentonados por su delirante líder Paraguayo “Payo” Cubas llevaron a la práctica una revuelta popular que alcanzó ribetes de violencia y en cierto momento puso en peligro la paz de la República, que aún permanece en tenso estado de condicionalidad.
Esto, debido al apoyo explícito que ha recibido el partido payista Cruzada Nacional de parte de adversarios eleccionarios ocasionales, como el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) y, en menor escala, la desteñida izquierda progresista bolivariana conocida como Frente Guasu, que acusó una derrota catastrófica y prácticamente ha desaparecido de la preferencia electoral con un solitario escaño en Senadores y ninguna Gobernación en su haber, entre otros resultados.
El descontento sobre el conteo de votos, especialmente el remanido Sobre 4, se ha extendido al punto que a diario cosecha adherentes, como un desconocido “Frente Opositor por el Respeto a la Constitución” que a través de las redes sociales llama a la rebelión popular, reivindica la “victoria” de Payo Cubas y “exige” la libertad del alucinante político preso en la Agrupación Especializada por 5 delitos contra la seguridad pública.
La Justicia Electoral, a través de los tres ministros (dos opositores y un colorado) ha explicado a través de la prensa los alcances de las quejas no formalizadas con denuncias escritas acerca de los puntos discutidos de los resultados, entre ellos el propagandeado Sobre 4 que, según la oposición, debe ser abierto para conocerse la verdad sobre el recuento del sufragio.
El ministro liberal del Tribunal Electoral, César Rossel, rechazó la postura crítica de la oposición tras afirmar que el Sobre 4 no tiene por qué ser abierto, teniendo en cuenta que este paso no figura entre las obligaciones del Tribunal, sino la apertura y suficiente divulgación de los anteriores Sobres 1, 2 y 3.
“Esos Sobres han sido objeto de observación y control, y reconocidos por las autoridades electorales el día de las elecciones, así como se estableció desde un principio, hace más de dos años, cuando todos los representantes partidarios dieron su aprobación al sistema de escrutinio y entonces nadie presentó denuncia o pedido de corrección, como sí lo hacen ahora en total contravención al orden y la institucionalidad del TSJE”, explicó la alta autoridad electoral.
“Ya no saben qué hacer o cómo justificar su catastrófica derrota”, opina este domingo un indignado republicano, tras cuestionar a los opositores por tratar de contaminar el proceso electoral que ellos mismos avalaron en su momento.
Observadores internacionales presentes en las elecciones, entre ellos representantes de Estados Unidos, la OEA y la Unión Europea, coincidieron en calificar el proceso de «limpio y transparente», expresando sus congratulaciones al elector paraguayo por la calidad del sufragio y el comportamiento ejemplar ante las urnas.