El secuestrado tiene una prolífica trayectoria política y emprendedora, y se suma dolorosamente a la larga lista de secuestros del Paraguay, de frente a una fuerza especialmente creada para erradicar el terrorismo y la inseguridad que no ofrece resultados.
Exactamente a 8 escasos días de que fuerzas militares y policiales de élite que componen la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) dejaron escapar de forma sospechosa e increíble a miembros del ilegal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) en los montes de Yby Yaú, estos mismos hombres y mujeres reaccionan con violencia y privan de su libertad a un ciudadano trabajador, en este caso el ex vicepresidente de la República Oscar Denis.
Tal como visualizaron en su momento expertos en cuestiones militares y antiguerrilleras, el grupo civil armado escondido en un pequeño sector de los montes norteños hizo una certera demostración de fuerza a las espaldas de pelotones de fuerzas especiales que a través de la prensa informaban encontrarse en plena tarea de rastreo del grupo de no más de 15 escapados.
El nuevo caso de secuestro, consumado en las narices de la FTC y en abierto desafío a la ciudadanía que pide a gritos la eliminación del sanguinario grupo insurgente, sorprende a la ciudadanía en el mismo momento que este miércoles aguardaba impaciente la explicación del presidente de la República y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Mario Abdo Benítez, acerca del fracaso de la incursión en los bosques de Yby Yaú y, esencialmente, las circunstancias detalladas que derivaron en la muerte de las dos niñas presentadas como guerrilleras.
“Este es el resultado de la inutilidad del gobierno. Esto se veía venir, y quién pagará las culpas, seguramente el pueblo otra vez, mientras los poderosos, que nunca fueron molestados por el EPP, seguirán campantes cada uno en sus cargos”, protestó en la red social el ciudadano Angel David Galeano.