Espectacular imagen de una de las tantas intervenciones al estilo «Vietnam» de las fuerzas antinarcóticas en el norte, que arrojan cifras monumentales en decomisos y daños económicos a la mafia, pero no reportan «peces» grandes o chicos detenidos.
Extensiones de cultivos ilícitos están siendo destruidas por un contingente conformado por agentes de la Senad, Policía Federal del Brasil, Ministerio Público y Fuerza de Tarea Conjunta en la Reserva Mbaracayú, del departamento de Canindeyú.
Luego de seis días de trabajo, las fuerzas combinadas lograron daños logísticos y financieros al narcotráfico que superan los 12 millones de dólares.
El recorrido operativo abarcó también al distrito de Yby Pytá.
Se trata del operativo Nueva Alianza XXXV, que está unida a las acciones que Paraguay y Brasil emprenden contra cultivos ilegales de marihuana, esta vez con alcance en el departamento de Canindeyú, donde descubrieron y destruyeron al mismo tiempo 138 hectáreas de la hierba adictiva, que representan 414 toneladas de droga.
Los agentes destacan el hecho de que la merca fue destruida antes de llegar a los mercados de comercialización y consumo.
Las patrullas de carácter exploratorio detectaron en lo que va de las seis jornadas de trabajo un total de 26 campamentos que ocultaban 2.910 kilos de marihuana lista, que fueron sacados de circulación.
La comitiva continuará manteniendo un alto nivel de intervenciones con los helicópteros de la Fuerza Aérea Paraguaya en zonas comprendidas por espacios protegidos, lo cual abre otra vertiente de intervenciones pensadas en la prevención de la tala indiscriminada de árboles por parte de narcotraficantes.
El lucro cesante de la actividad ilícita en dicha región del país con la producción anulada en estos 6 días asciende a un total de 12,4 millones de dólares americanos, informó la Senad.
Como viene ocurriendo en intervenciones de gran calado contra el narcotráfico y el decomiso de sustancias, en esta oportunidad tampoco se reporta la existencia de detenidos, desconociéndose el motivo de semejante “olvido”, a menos que realmente el enorme despliegue de efectivos, equipos y armamento que le cuestan millones de dólares al contribuyente finalmente no haya logrado poner las manos sobre ningún “pez gordo” o “soldado” de la mafia criminal.