Impresionante cantidad de partidarios de la Lista 1 en el club Ysateño de Asunción, donde Santi adelantó que la ANR volverá a ser gobierno. «Vamos a desarrollar el Paraguay sin injerencia extranjera», dijo en alusión indirecta al manoseo a la soberanía nacional por parte de EE.UU.

La República del Paraguay no permitirá la intromisión de ninguna potencia extranjera durante el próximo gobierno nacional, que nuevamente será del Partido Colorado porque así lo ha decidido la gente, afirmó la noche de este martes el candidato a presidente de la República por la Lista 1, Santiago Peña.

Fue ante una multitud aproximada de 10.000 colorados que rebosaron las instalaciones del club Ysateño del barrio San Pablo de Asunción, jurisdicción de la seccional colorada Nº 24, en ocasión del cierre de campaña de la candidata a senadora Lizzarella Valiente y del candidato a diputado de la Nación, Raúl Latorre.

La presencia de Santi Peña le dio realce a la organización del evento, que destacó el ambiente de unidad reinante, lo cual no pasó desapercibido para el líder de la Lista 1.

“Esta misma unidad será la que nos llevará nuevamente al poder en las próximas elecciones, donde con seguridad lograremos la victoria”, afirmó Peña, quien en todo momento, y como se ha hecho costumbre, en ningún momento se refirió en términos despectivos o descalificadores a la oposición y el globalismo perverso que, en contrapartida, practican una dialéctica de odio y división en cada exposición pública, seguramente en busca de torcer la voluntad de la mayoría del electorado que tempranamente ha optado por depositar sus votos en favor del Partido Colorado.

Peña alentó a los leales a no bajar la guardia y a acudir masivamente a las urnas el próximo 30 de abril, “en la seguridad de que va a ganar la mayoría colorada”.

En otro momento, el presidenciable por la ANR prometió levantar el país y elevarle a un nivel de desarrollo digno, sin la injerencia extranjera.

Un factor fundamental en el sentimiento crítico del movimiento que ha propiciado la candidatura de Peña ha sido el grosero manoseo de la soberanía paraguaya por parte de Estados Unidos, que ha bajado el pulgar de forma unilateral a jerarcas paraguayos por encima de la majestad de la justicia, del respeto a las instituciones del Estado y del derecho de la gente de reclamar justicia y seguridad jurídica.

“Aquí estamos apenas una parte de los miles de electores que el 30 seremos protagonistas de una victoria aplastante”, dijo por su parte el candidato a diputado Latorre, quien también pidió la presencia masiva de los colorados en las urnas “y después poder celebrar el hecho de que vamos a estar mejor”.

Por su lado, Lizzarella Valiente puso énfasis en el gran desafío de defender a la familia ante la grave amenaza proveniente de la agenda globalista aliada a la oposición libero-zurda.

“La familia paraguaya está en jaque queridos correligionarios, por eso estamos ante la urgente necesidad de unir fuerzas no solo para salvar a la sociedad sino al propio país de las garras de la perversión”, disparó.

«¡Si esto no es el pueblo, el pueblo dónde está!», vociferaba de forma permanente un bullicioso grupo de republicanos perteneciente a la seccional colorada Nº 3 del barrio Campo Grande.

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