La detención de Payo polariza la atención de la gente, que no ve la hora de asegurar las rejas para este político devenido en terrorista en potencia que pone de rodillas al país y amenaza abiertamente con olas de violencia y muerte.
Risas irónicas y repudio al mismo tiempo causan este viernes expresiones de defensores de derechos humanos y un abanico de colectivos sociales vinculados con la izquierda, abortistas y pro-gay, entre otros sectores degradados de la sociedad que salen en defensa de antisociales del partido payista Cruzada Nacional que están presos en la Agrupación Especializada de Asunción por los desmanes causados después de las elecciones como protesta por el revés sufrido y el supuesto fraude de que fueron víctimas.
“Estuvimos hablando con algunos de los detenidos en la Agrupación Especializada y vimos que presentan señales evidentes de golpes y maltratos de la Policía, pero esto no quedará así porque vamos a accionar contra la dictadura del gobierno, que con palos y torturas quiere defender el fraude”, afirma ante los medios de prensa una vocera del Mecanismo de Prevención de la Tortura que se presentó en la dependencia penal de la Policía en el barrio Tacumbú de Asunción para salir en defensa de los buscapleitos.
Blandiendo el conocido perfil zurdo de “la revolución”, la madrina de los detenidos se refirió a sus ocasionales defendidos y graficó la situación que supuestamente enfrentan en la Agrupación Especializada.
“Algunos tienen frío, están desprotegidos, presentan señales evidentes de golpes y torturas, otros padecen ansiedad y miedo, necesitan atención mientras vemos la forma de sacarles de ese lugar impropio porque ellos deben estar defendiendo la República de los abusos y represión”, añadió la mujer, especialista en salir en defensa de indeseables, los mismos que amenazan con matar policías y quemar el país.
En el mismo lugar se encuentra recluido desde esta tarde el líder de Cruzada Nacional, Paraguayo “Payo” Cubas, acusado de un abanico de delitos e incluso crímenes, quien fue detenido luego de dudosos cabildeos de la Fiscalía General del Estado, que hasta último momento buscó excusas para mantener libre al ex presidenciable.
Desde el pasado lunes, inmediatamente después de conocerse los resultados electorales que le dieron perdedor, Payo mantiene en vilo la seguridad de la República y la libertad de las personas con ataques violentos y amenazas de variado calibre que, según la ley, constituyen graves cargos penales que ameritan la prisión preventiva, en primer lugar, mientras el Ministerio Público hace su trabajo de seguimiento e investigación de la causa abierta en su contra.
Del total de 75 personas detenidas en un primer momento, más de la mitad recuperaron la libertad en un santiamén, y se espera que los restantes piqueteros salgan libres en cualquier momento, como es “tradición” en casos similares de protestas sociales y políticas.
Críticos de la justicia también dan como un hecho la pronta libertad de Payo Cubas, teniendo presente antecedentes parecidos, a pesar del cúmulo de pruebas y evidencias que pesan sobre el acusado, y de la amenaza verbal abierta contra la institucionalidad y la seguridad jurídica de la República que el mismo expresa sin pelos en la lengua en las redes sociales, ante la prensa y ante todos quienes se le cruzan en el camino.
El propio Payo se autodefine como revolucionario anarquista, exhibiendo una conducta tachada de delirante y esquizofrénica, sin que nadie hasta el momento se haya animado a ponerle frenos legales, lo cual es aprovechado por el político para generar tormentas sociales con total impunidad.