Uno de las decenas de memes que recorren las redes sociales muestra a un anciano Efraín aún aguardando que saquen del cargo a la fiscal general. El observatorio ciudadano dispara misiles verbales contra el «show electoral» montado en Diputados.

En un aparte del grave atentado contra la institucionalidad de la República, protagonizado por el abdismo en alianza con la oposición y el soporte de la prensa amiga, la ciudadanía hace apuestas y emite todo tipo de memes contra la “Cámara de la Vergüenza” por la indefinición artera y malintencionada del pedido de juicio político a la fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez.

El caso se encuentra desde hace una semana en la parte de lectura y consideración del libelo acusatorio, donde oficialistas y adherentes de la Concertación alargan exprofeso los días de sesiones con el evidente propósito de torcer la voluntad de los votantes en mayoría, a través de chantajes, extorsiones y aprietes de grueso calibre, que según el diputado Raúl Latorre no buscan precisamente la salida de la fiscal general sino asestar una dura estocada electoral al cartismo.

“Lo que no pueden con los votos, buscan obtenerlo con trampas y otros variados tipos de artilugios, pero no van a lograrlo porque en diciembre tomará la posta en la ANR nuestro candidato Horacio Cartes, y en el 2023 será electo flamante presidente de la República del Paraguay el compañero Santiago Peña”, vocifera desafiante el diputado Basilio Núñez en medio del tiroteo intenso de fuego cruzado con los “falsos colorados” en alusión al oficialismo abdista, y la oposición aliada al gobierno con el tutelaje mediático afín.

El presidente del PLRA, Efraín Alegre, es uno de los personajes más buscados por los internautas para someterlo al escrache y la burla de la ciudadanía que le tilda de perdedor, fracasado y haragán, entre otros descalificativos.

También lideran la saga de ironías y sarcasmo las diputadas opositoras Kattya González y Celeste Amarilla, etiquetadas por el observatorio ciudadano como las legisladoras más insolentes, ordinarias, vanidosas y petulantes del Congreso Nacional, a pesar de que una de ellas se jacta de haber culminado sus estudios terciarios.

Sandra Quiñónez ha sido reconocida este año por el gobierno norteamericano por su lucha contra el crimen organizado, y hace unos días fue elegida presidenta sustituta de la Asociación de Fiscales de Iberoamérica, un mérito apreciable que el oficialismo y socios opositores quieren desconocer para ensuciar su imagen y tratar de presentarla en sociedad como la mala de la película, sin reparar en la gestión desastrosa del jefe de la cruzada persecutoria, el presidente Mario Abdo Benítez, quien, según sus detractores, utiliza a singulares “perritas” en Diputados para tumbar al cartismo, extender su reinado y continuar con el festín de corrupción y latrocinio en la función pública.

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