Señales de movimiento de narcos que no fueron avistados por los agentes de la Senad, quienes acostumbran a destruir toneladas de droga sin detener a ningún narco, en acciones por demás inútiles y costosas porque «muere el perro, pero no la rabia».

La zona roja conocida como Colonia Estrella, Departamento de Amambay, es nuevamente noticia porque en el lugar fueron detectadas unas 6 hectáreas de marihuana utilizadas por estructuras del narcotráfico para la producción y acopio de cultivos ilícitos.

Las acciones realizadas por agentes antinarcóticos de la Senad apostados en la ciudad de Pedro Juan Caballero culminaron con la erradicación de la enorme cantidad de droga adictiva en etapa de cosecha.

Las tareas desarrolladas fueron coordinadas con el fiscal Celso Morales y en primer lugar fue detectado un campamento precario que servía de depósito de una plantación de alrededor de 6 hectáreas, equivalentes a unas 18 toneladas de marihuana.

Estas operaciones son el resultado de tareas investigativas impulsadas por la Senad que, según los informes, seguirán en curso debido a que dicha zona es utilizada por los esquemas de producción de drogas para llevar adelante el ilícito.

Se supone que cualquier intervención antinarcótica, en este caso de la Senad, debería ser necesariamente precedida de trabajos de investigación, control y seguimiento para asegurar las acciones y al mismo tiempo garantizar la seguridad de los agentes.

Pero, una vez más, como se ha vuelto rutinario en las acciones de la Senad, la institución antinarcótica no informa sobre detenidos, de lo cual se puede deducir que ningún narco o persona sospechosa de estar involucrada en el negocio sucio fue privado de libertad, en cuyo caso las ampulosas y costosas intervenciones se convierten en simples paseos, gastos inútiles o acciones solo ensayadas para la foto.

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