El temor se ha apoderado de los norteños ante la presencia siempre acechante del EPP y de bandas armadas de cuatreros que se multiplican ante la falta de efectivos policiales y equipos para hacer frente al flagelo.

LORETO, Dpto. de Concepción (Por Freddy Rojas).

Un hecho de abigeato de nuevo ocurrió en horas de la madrugada de pasado fin de semana en un camino vecinal de la localidad de Huguá Guasú, de este distrito, donde faenaron ilegalmente dos animales vacunos (bueyes).

Uno de los vacunos que cayó víctima de cuatreros es de pelaje negro y otro de pelaje amarillo/blanco, pertenecientes a Estanislao Casanova Romero, paraguayo, casado (66 años), domiciliado en la localidad de Huguá Rivas (La Asunción), de esta región.

Fuentes de la subcomisaría 16ª de Huguá Guasú informaron que se enteraron del hecho a través de Bienvenido Ayala Amarilla, paraguayo, soltero (36 años), encargado de dichos animales vacunos que el propietario le había prestado para realizar trabajos de chacra, refiriendo que ambos bueyes estaban atados al costado de su casa.  

Los uniformados informaron que el empleado se levantó a las 04:00 de la madrugada para empezar su día laboral y constató que los animales ya no estaban en el lugar donde los dejó atados, por lo cual procedió a la búsqueda por los alrededores, con resultado infructuoso.

En el marco de la investigación correspondiente los agentes policiales fueron recibidos en el lugar del hecho por Lidia Centurión Ovelar , paraguaya, viuda, (56 años), dueña de la casa, y en compañía de la misma se realizó la búsqueda dentro de su propiedad, pudiendo observarse huellas de personas y de animales que se dirigían hacia el cementerio local.

Siguiendo las pisadas, a 300 metros del camposanto se encontraron restos de animales faenados tales como cabezas, patas y menudencias; además quedaron huellas de neumáticos de vehículo (presumiblemente camioneta).

De acuerdo a lo observado, presumen que en ese vehículo fue trasportada la carne faenada ilícitamente, y que a través de esas huellas se nota que se dirigieron a la zona urbana de la ciudad.

Continúan las averiguaciones para el esclarecimiento del caso y localizar a los autores del hecho delictivo.

Por otro lado, la Policía departamental informó que los casos de abigeato se multiplican debido a la falta de efectivos y equipos para enfrentar el flagelo.

“Lastimosamente tenemos que lidiar muchas veces con la impotencia ante la cantidad de denuncias de cuatrerismo”, lamentó un efectivo policial que llamó la atención sobre el auge siempre vigente del abigeato en la amplia región norteña, como si la presencia del EPP no fuera suficiente para generar tensión y hermetismo en materia de seguridad.

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