«Yo no quiero hablar guaraní porque no me importa… Ustedes están escuchando: prohibido», les dijo a sus empleados la ganadera brasiguaya a través de un audio que corrió como reguero de pólvora y generó la repulsa de la ciudadanía paraguaya.

A través de un comunicado de prensa, el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS) expresó este lunes el malestar oficial por el caso que involucra a una ciudadana de origen brasileña radicada en Paraguay (brasiguaya), que colapsó las redes sociales el lunes, luego de que saliera a la luz pública un audio donde se escucha a la misma proferir insultos al idioma guaraní y a los empleados de su estancia que hablan este idioma oficial, amenazándoles con sanciones en caso de volver a escuchar ese lenguaje “odioso” para la misma.

El MTESS “repudia cualquier acto discriminatorio a trabajadores paraguayos”, expresa el documento.

Añade que “el uso de nuestro idioma guaraní no puede ser motivo de amenazas, amedrentamiento o discriminación”, tras lo cual sostiene que “el Ministerio de Trabajo intervendrá en el supuesto caso de discriminación para corroborar el hecho y asegurar el respeto irrestricto de los derechos de los trabajadores paraguayos de utilizar nuestros idiomas oficiales consagrados en la Carta Magna”.

La Junta Municipal de Curuguaty, ciudad del departamento de Canindeyú donde reside la familia Neukamp repudiada por el hecho, también se manifestó sobre el incidente, en consonancia con el reclamo masivo de los ciudadanos.

A través de un comunicado, la corporación comunal señala en primer lugar que el Paraguay es un país pluricultural y bilingüe, tras lo cual insta a los organismos correspondientes a tomar intervención específica en los siguientes puntos: 1) Por la defensa de los derechos humanos; 2) Por la protección de los trabajadores paraguayos que están siendo amenazados en su libertad de expresión, y 3) Por la protección de los empleados de los Neukamp, que en estos momentos están siendo discriminados, pese a la prohibición establecida en el Art. 88 de la Constitución Nacional de la República del Paraguay.

Se da como un hecho que en la próxima sesión del Congreso nacional el caso será motivo de repudio, en un momento donde se acentúan las denuncias de violaciones de derechos humanos y seguridad.

La ciudadanía curuguateña, mientras tanto, se ha declarado en vigilia, “hasta que se dé solución definitiva a este tipo de hechos que ensucia las relaciones amistosas entre nuestros países, a sabiendas de que no todos los brasiguayos ostentan este perfil de soberbios y discriminativos contra los símbolos de nuestro país, pero si no frenamos el abuso y les seguimos dando carta blanca a los prepotentes esto seguramente acabará de otra manera porque no confiamos en el patriotismo de nuestras autoridades”, disparó Venancio Estigarribia en representación de uno de los grupos de indignados que se manifestó frente a la mansión de los Neukamp.

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