Miles de niños dejarán de recibir el almuerzo escolar si se rechaza la donación de la UE, afirma el MEC, en un desembozado intento por echar mano de los millones de dólares para la «perversión educativa», levantando oleada de críticas contra el gobierno de Marito.

Como si las manifestaciones vehementes de padres de familia, sociedad civil y la propia Iglesia Católica contra la llamada Transformación Educativa fueran detalles menores, el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) realiza una campaña aparte para tratar de embaucar a incautos con falsos positivos acerca del demonizado proyecto global y de esa manera poder acceder a los millones de euros en juego ofrecidos por la Unión Europea en “donación” a favor de la educación paraguaya.

Estos días se dio a conocer un listado de 35 escuelas subvencionadas católicas que, según el propio ministro Nicolás Zárate, dejarán de recibir el almuerzo escolar en caso de que se anule el convenio entre nuestro país y la UE aprobada por Diputados bajo fuerte presión ciudadana, a pesar de la fuerte oposición del presidente Mario Abdo Benítez, el primer interesado en la “educación de la gente”.

“La salida del MEC se trata de un simple chantaje con olor a negociado feroz con nuestros niños”, opina este miércoles un padre de familia luego de enterarse del listado de escuelas católica cuyos estudiantes supuestamente pasarán hambre por culpa de las personas dignas de este país que se oponen a la degeneración oficial en las aulas a través de la “transformación educativa”.

“A toda costa, y a cualquier precio, quieren esa plata, a pesar de que supuestamente ya fue ejecutada más de la mitad de los 83 millones de euros cuyo destino se desconoce, porque la educación paraguaya está totalmente en ruinas”, recalcó el indignado.

Oleada de críticas en paralelo recibió la información sobre el “hambre en las escuelas” propalada por el MEC, especialmente de quienes sostienen que no es la iniciativa internacional o global la que debe hacerse cargo de la educación y la alimentación escolares, sino el Estado paraguayo.

“Se destinan cada año miles de millones de guaraníes de fondos públicos de royalties y Fonacide supuestamente para la atención de necesidades básicas, entre ellas la salud y la educación, pero finalmente no se ven los resultados. Sí se sabe que gran parte de esas sumas fabulosas que bien podrían significar la solución a graves problemas del país pasan en engrosar cuentas corrientes de las autoridades y otro tipo de abusos que no son investigados, y prueba de ello es que no hay ninguna autoridad presa por robo de esos fondos”, disparó en su sitio social Maite Selene Burgos.

En el mismo sentido que esta madre de familia, otros centenares de posteos disparan munición gruesa contra el gobierno del presidente Marito, a quien acusan de rifar el futuro de los niños paraguayos y continuar extendidamente con su política de mendicidad, tratando de colectar la mayor cantidad de donaciones, como las recibidas durante la pandemia cuyo destino también ha sido objeto de rapiña inmisericorde.

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