“La buena noticia es que la pandemia va pasar, y mientras tanto debemos mantenernos fortalecidos, física, mental y espiritualmente. Necesitamos vivir, y para ello debemos llevar una vida saludable, cuidarnos, y cuidar a quienes se desenvuelven en nuestro entorno», expresó la profesional paraguaya radicada en Brasil.

Una exposición virtual práctica de contenido didáctico dio a conocer la Ing. Gisselle Arévalo, profesional paraguaya radicada en el Brasil, país que enfrenta los rigores del coronavirus en medio de golpes emocionales que configuran el pan de cada día de una población sobresaltada por la magnitud del mal, calificado como tragedia nacional, de todo lo cual se pueden sacar conclusiones de valor, según afirmó.

Gisselle se concentró en realizar un compendio de lo que significa el covid-19 para el gigante sudamericano, y en ese sentido comenzó diciendo que la enfermedad proviene de la familia del coronavirus, circula entre los animales e infecta a las personas cuando la convivencia es muy próxima.

Se refirió también al fenómeno iniciado en China el año pasado, que al poco tiempo se extendió a todo el mundo.

“El 11 de marzo de 2020, la enfermedad fue considerada pandemia por su rápida y extendida diseminación geográfica”, expresó.

Al concentrar su atención en Brasil, dijo que el primer caso positivo se registró el 17 febrero de este año, y el 21 de marzo todo Brasil se encontraba infectado.

“El 28 de abril, Brasil superó a China en cantidad de fallecidos por el covid-19, y el 6 de mayo fue considerado epicentro del virus en América del Sur; el 22 de mayo era certificado por la Organización Mundial de la Salud como segundo país con mayor cantidad de casos de covid en el mundo, que lo conserva hasta ahora, y el 4 de junio pasado fue el tercer país con más muertes en el mundo”, acotó la profesional.

Comentó que el 19 de junio pasado se llegó al millón de casos confirmados; apenas dos días después las autoridades sanitarias reportaron otros 50.000 fallecidos, y en menos de un mes de aquel récord de un millón de casos, la cifra de contagiados se dobló a 2 millones.

“Tomando como fecha referencial el 26 de julio, los casos confirmados alcanzaron a 2.419.091 personas, con más de 87.004 fallecidos y un total de 1.634.274 recuperados (67 por ciento del total)”, puntualizó.

Con respecto al estado de Espirito Santo, donde fija residencia, Gisselle dijo que existen 77.000 casos confirmados, 2.411 fallecidos y 75 por ciento de recuperados.

“En el interior del estado hay mucha preocupación; las clases están suspendidas, los comercios cerrados, se recomienda el uso masivo y obligatorio de tapabocas y alcohol en gel, pero la gente no respeta; hay aglomeraciones y los funcionarios de blanco ruegan a la gente que se quede en casa, haciendo también reclamos de insumos al gobierno”, mencionó.

Recordó los homenajes a las víctimas del covid realizados en las playas más famosas, que también emitieron un mensaje de protesta por la situación, y el mensaje de reflexión para toda la población.

“La buena noticia es que todo esto va a pasar, y mientras tanto debemos mantenernos fortalecidos, física, mental y espiritualmente. Necesitamos vivir, y para ello debemos llevar una vida saludable, cuidarnos, y cuidar a quienes se desenvuelven en nuestro entorno. Asumamos de que hay mucha presión en el ambiente, pero tenemos que mantener la sensación de que ese día que todos anhelamos llegará”, expresó.

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