El falso aguatero aparece en la gráfica junto con los ladrillos de cocaína incautados cuando estaban a punto de ser embarcados a España. La seguridad del aeropuerto repite flancos de debilidad ante el embate de la mafia organizada.

Un camión repartidor de agua resultó involucrado en un millonario cargamento de droga con destino a Europa, reportó un informe oficial que detalló el esquema de tráfico utilizado por “mulas” sin hacer mención de los casos repetidos de vulnerabilidad del sistema de seguridad que, seguramente, permitió en todos estos años la “exportación” de volúmenes importantes de la “merca” por valores siderales en beneficio de la mafia paraguaya.

En un reciente operativo, funcionarios de Dinac, Aduanas y la Senad detectaron una carga con más de 58 kilos de cocaína a punto de ser embarcada con destino a Madrid, España.

De acuerdo a los datos, la maniobra ilícita consistió en aprovechar el acceso a un área restringida de un empleado proveedor de bidones de agua, quien trasladó el alijo hasta la zona donde se alistan encomiendas para su ingreso final en la bodega de pasajeros.

A resultas de la intervención quedó detenido el presunto narco y en otro frente se realiza una investigación para identificar a los demás integrantes de la asociación ilícita que facilitaron la violación de los protocolos de seguridad para el tráfico.

Llamó la atención de los agentes la presencia de un paquete de encomiendas que no había transitado por los canales de verificación correspondientes y, ante la sospecha de un ilícito, el can Sora tomó participación para verificar la carga sospechosa que dio positivo para cocaína.

El caso fue comunicado a la fiscala Elva Cáceres, quien recurrió a las imágenes de circuito cerrado de la terminal aérea internacional para indagar sobre la identidad de la persona encargada del depósito, quien resultó identificado como Luis Gilberto Casuriaga Cubilla, de 34 años, quien había accedido mediante un transporte de agua con el cargamento en el tramo final de la cadena logística de carga y exportación de encomiendas.

La fiscala dispuso la detención del empleado y la verificación del paquete, lo cual derivó en el hallazgo de un total de 58,498 kilogramos de cocaína.

Aunque las incautaciones de droga en el aeropuerto siempre son noticia, este caso llamó la atención por la nueva modalidad detectada.

La droga incautada tiene un valor en España de unos 3,5 millones de dólares, según se informó.

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