Más de dos generaciones de paraguayos vieron el proyecto habitacional perdido en el latrocinio y la burocracia. Ahora echaron a andar la megaobra con renovadas esperanzas para miles de compatriotas anhelantes del techo propio.

En sus inicios, el aparato de gobierno lo presentó con ostentación y lujo de detalles, despertando el interés de personas que ya, por ese entonces, enfrentaban el problema de techo propio.

El Complejo de Viviendas Mariano Roque Alonso iba a ser, en los papeles, la solución esperada especialmente por personas de medios y bajos ingresos, pero la realidad ha sido bien distinta porque las evidencias demostraron que fue creado especialmente para el robo, postergando indefinidamente el anhelo de muchos paraguayos.

El caso ha quedado sepultado en el tiempo, y nadie ha ido a parar con sus huesos a la cárcel a pesar de los miles de millones de dólares esquilmados a las finanzas públicas, o sea, al ciudadano.

Hoy día parece que la oscuridad que ha cubierto el proyecto se encamina por un túnel donde se observa al final una luz de esperanza, en un momento con un déficit habitacional aproximado de 130.000 viviendas, según el Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH).

El anterior proyecto fue rebautizado como Conjunto Habitacional Defensores del Chaco, y representará unas 3.000 soluciones habitacionales, adecuadas para albergar a 15.000 personas en un ambiente saludable y digno, con servicios de calidad reproducidos de países de primer mundo, áreas verdes, espacios de recreación, planta de tratamiento de efluentes, canalización y potabilización de agua, entre tantos otros.

“Será una ciudad dentro de otra ciudad”, explicó un técnico del MUVH consultado por La Mira.

El proyecto abarca 17,8 hectáreas del ex predio de IPS, que habían sido adquiridas por el ex Senavitat y que servirán al principio para la construcción de departamentos de 2 y 3 habitaciones con inversión propia, y en alianza con el sector privado que se encargará de la financiación.

En este sentido, la secretaría de Estado para la vivienda informó que están previstas 4 categorías de subsidios que permitirán a los interesados acceder al anhelado departamento propio pagando una cuota a precio de alquiler.

A más de un aporte estatal, el postulante tendrá la posibilidad de gestionar un crédito hasta a 20 años de plazo y a bajo interés en los bancos de plaza.

El Gobierno afirma que el proyecto generará mano de obra directa a 800 personas y trabajo indirecto a otras 2000 personas, generando un gran movimiento económico y, fundamentalmente, la posibilidad de que las personas dejen de pagar alquiler para tener su vivienda propia pagando prácticamente el mismo monto.

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