En vez de dedicarse a la producción legal en tierras con abundantes nutrientes, agua valiosa del acuífero Guaraní y medio ambiente 100 por ciento saludable, muchas familias prefieren dedicarse al negocio ilegal de la marihuana.
Agentes antinarcóticos se incautaron de más de 21 toneladas de marihuana, como parte de un procedimiento realizado en la colonia Yakare’i, distrito de Caaguazú, donde se encontraba operando desde hace tiempo una estructura consolidada de producción y acopio de cannabis en gran cantidad, destinada al mercado de consumo internacional.
La oficina regional de la Senad, en coordinación con el fiscal Osvaldo García, realizó dos allanamientos.
En la primera intervención allanaron una vivienda que oficiaba de base de las operaciones ilegales, donde detuvieron al presunto narco Ever Gustavo Rivas, paraguayo, mayor de edad, quien aparentemente oficiaba de encargado del lugar.
Tras verificar una zona boscosa dentro de la propiedad rural, los antinarcóticos detectaron un total de 248 kilos de marihuana lista para el alijo, así como elementos utilizados generalmente en los campamentos de producción de cannabis.
Los antidrogas procedieron además a la destrucción de 3 hectáreas de plantaciones de marihuana, que tenían un potencial de producción aproximado de 9 toneladas de la hierba ilegal.
El mismo contingente operativo allanó posteriormente otra propiedad dentro de la misma colonia Yakare’i, donde detectaron y eliminaron 4 hectáreas de cultivos de cannabis, equivalentes a 12 toneladas de droga.
En total, con ambas incursiones, fueron sacadas de circulación más de 21 toneladas de la droga, ocasionando un lucro cesante aproximado de 630.000 dólares al narcotráfico.
Paraguay es considerado el principal país productor mundial de marihuana.
La calidad de la tierra facilita una producción de alta competitividad, que eleva los precios en el mercado exterior y al mismo tiempo incrementa la demanda, que arroja beneficios económicos siderales para la mafia del narcotráfico y el lavado de dinero.