El ex intendente Peña, quien aparece en la foto acompañando a cantereros en visita proselitista, anunció que en dos meses más habrá agua potable en gran parte de Emboscada, como parte de un proyecto que busca la provisión total para mediados del próximo año.
Definitivamente, en noviembre o diciembre próximos ya no faltará agua en algunos barrios de Emboscada, como preludio de un final feliz que prevé la provisión total para mediados del próximo año. El ex intendente municipal Silvio Andrés Peña, en carrera por otro período al frente de la Municipalidad, brindó detalles del convenio anulado con los Baumann, y el nuevo emprendimiento a ser erigido en un predio contratado con la familia Cabrera, a orillas del río Paraguay.
-El tema agua es fundamental para la gente, que clama por una solución definitiva al cíclico suplicio.
– Cuando renuncié a mi mandato, en agosto pasado, habíamos dejado un acuerdo con los propietarios del establecimiento San Guillermo, donde debía estar instalada la estructura del servicio de agua purificada a la ciudad. Los hijos de la señora Baumann habían pedido copia del convenio que la Essap no les hizo llegar; posteriormente, cuando yo ya había renunciado, logré que la Essap diera a conocer ese documento, que adolecía de varios puntos de objeción, entre ellos la desactualización del certificado de impacto ambiental, mientras que el contrato pretendido y para lo cual se había acordado inicialmente, que era de 25 años, figuraba nada más que 5 años, a más de otras modificaciones de la conversación que habíamos mantenido los responsables de la empresa Ybycuí S.A. de la familia Baumann, representantes de Essap y de la Municipalidad de Emboscada, cuando yo me desempeñaba como intendente.
-La gente muestra señales de fastidio, y amenaza con tomar medidas de presión.
-La ciudadanía está en su derecho, pero hay que recordar que el convenio inicial con los Baumann no corrió por falta de acuerdo. Debido a eso, la actual intendenta municipal ha gestionado la construcción de la estructura de servicio en otro lado, a orillas del río Paraguay, con la familia Cabrera. Justamente el viernes pasado se firmó el nuevo convenio para la construcción inmediata de la planta de tratamiento este mismo lunes, luego de la visita que harán al lugar autoridades y representantes de la familia Cabrera.
-Se decía que el Gobierno nacional iba a tener a cargo toda la responsabilidad legal, logística y de servicio.
-En la práctica, está demostrado que no es así. Como municipio, nos encargamos de solucionar el problema que supuestamente debía ser asumido por el Gobierno nacional. Lo peor de todo es que la misma Essap nos llegó a amenazar de que si la Municipalidad de Emboscada no solucionaba el tema de contrato iba a llevar el proyecto a Ciudad del Este. Eso ocurrió hace unas dos semanas. Imagínese, sin ninguna consideración hacia la necesidad de la gente iban a dejarles sin agua en plena época de calor.
-¿Cómo queda entonces la distribución de responsabilidades?
-La Municipalidad se va a encargar de gerenciar el lugar para la instalación de la planta de tratamiento, y el montaje estará a cargo de la Essap. La Municipalidad también va a pagar en concepto de alquiler del sitio por los próximos 25 años.
-¿Están previstas más obras dentro de la estructura de servicio?
-Se van a construir dos estanques, uno grande en Ysypoyu, y otro en la zona céntrica de Emboscada, que van a proveer de agua potable a nuestra ciudad, mientras que las Juntas de Saneamiento se van a encargar de la distribución. Un punto importante es que las Juntas de Saneamiento se organicen y les pongan medidores a la gente, que va a pagar por el consumo porque la Essap va a cobrar por el suministro de agua purificada.
–Estamos hablando entonces de un próximo final feliz, después de tantos años de espera.
-Agua ya no va a faltar más en la ciudad de Emboscada, definitivamente.
-¿Se puede hablar de plazos?
-Este proyecto se va a concretar antes de las elecciones. Este mismo lunes, la Essap ya comenzará a montar la planta de tratamiento móvil, que será trasladada en partes a bordo de camiones, eso terminará en unas 3 semanas; el acueducto ya está, por lo que solo faltan la planta de tratamiento y la provisión de agua. Con ello, para este noviembre o diciembre ya tendrá agua potable la mayoría de las viviendas de los barrios Ysypoyú, Cocué Guazú y Cachela, y en una segunda etapa recibirán el vital servicio los demás barrios de la ciudad.