El titular de la UIP dio apoyo implícito a la ex senadora Kattya González y pidió el fin de la impunidad sin hacer alusiones específicas y recibiendo, en cambio, un tirón de orejas del Gobierno.
En el mismo sentido que la dialéctica de los defensores de la senadora destituida Kattya González y de la alianza opositora, donde figuran como invitados especiales la embajada de Estados Unidos y el cardenal Adalberto Martínez, la Unión Industrial Paraguaya (UIP) intentó poner contra la pared al presidente de la República, Santiago Peña, durante una reunión en la cual los directivos sentaron sus puntos de vista sobre la realidad nacional y su vínculo con el interés sectorial.
El titular del gremio industrial, Enrique Duarte, en el tradicional tono de vehemencia contra todo lo que signifique oficialismo, disparó municiones verbales contra la impunidad reinante en el país y, esencialmente, la ausencia de seguridad jurídica “que hacen correr a los inversionistas”.
En una extensa perorata sin alusiones específicas, Duarte dijo que el Paraguay debe presentar condiciones adecuadas para la inversión, entre ellas la confianza y credibilidad, pero que en la óptica del gremio a su cargo ambas variables están siendo lesionadas por el actual gobierno de Peña.
“Debemos reclamar las condiciones para poder trabajar tranquilos”, recalcó el directivo industrial haciendo alusión a una próxima reunión presencial con el presidente de la República, a quien presentarán un combo de reclamos, entre ellos la seguridad jurídica.
Este último reclamo es entendido por sectores oficiales como un tirón de orejas al gobierno por sacarle del cargo a la senadora Kattya González, sin reparar que se tratan de poderes independientes y que Santi tiene prohibición expresa de involucrarse en asuntos de otros poderes., so pena de enfrentar un juicio político y ser destituido del cargo, que es lo que denodadamente pretenden la alianza opositora, la embajada de EE.UU., el cardenal y los holdings mediáticos amigos.
Preguntado por la prensa abdista sobre la posición de los industriales, el presidente se limitó a decir que “sigan trabajando e invirtiendo y no se metan en política partidaria”, refiriéndose implícitamente a la campaña de apoyo a la polémica ex senadora de la oposición echada de su curul en el Senado luego de que no pudiera revertir denuncias de corrupción y producción de documentos públicos de contenido falso.
Kattya es señalada de liderar la campaña perversa y sucia de electoralismo para las elecciones generales del 2023 y ya entonces, como ahora, los industriales le han dado apoyo implícito.