Histórico antro de corrupción, la administración anterior de la Dinac brilló por su ineficiencia, dejando al desnudo sonoras irregularidades que persisten sin visos de solución.
“Gobernar una institución aeronáutica en el marco de una economía mundial parada, con aerolíneas inmovilizadas y empresas sin poder ofrecer sus servicios a nadie, exige recortes de gastos superfluos y frenar la corrupción en la aviación civil en el Paraguay”, afirmó el Lic. Lorenzo Orué, profesional de la Dinac con varios años de servicio.
Enumeró una serie de irregularidades que quedan al desnudo luego de la desastrosa gestión del anterior titular del ente, Edgar Melgarejo, que continúan campantes hasta la fecha.
“La administración de Edgar Melgarejo recibió un superávit de G. 95.000 millones. Se trata de un gasto innecesario absorbido por la adjudicación del alquiler de un hangar inservible a favor de la empresa Transporte Aéreos del Mercosur por G. 7.032 millones”, refirió, tras señalar que el local presenta un aspecto de descuido total.
“Hasta la fecha no tenemos noticia de acciones civiles y penales contra los responsables. Y si el ex presidente de TAM Mercosur es el supuesto responsable que promovió este millonario despojo a la aviación paraguaya, qué se espera para que se le investigue y al mismo tiempo se informe cuántos millones recibe de salario en la DINAC, por medio de las millonarias transferencias que realizamos a organismos internacionales”, recalcó Orué.
También se pregunta dónde están los supuestos recortes de G. 2.700 millones que se debió suprimir con la eliminación de los alquileres innecesarios de dos pisos del edificio World Trade Center.
“Tenemos 6 pisos libres en el Ministerio de Defensa Nacional, con oficinas totalmente equipadas, casi 40 baños de lujo, con una oficina de presidencia con baño privado, una sala para reuniones y un ascensor con entrada independiente, con alquiler de tan solo G. 1.400 millones por año, pero prefieren malgastar más de G. 10.000 millones arrastrando un compromiso contractual perjudicial para el Estado”, añadió.
Denunció igualmente las millonarias sumas de dinero para solventar elevadas asignaciones salariales de costosos asesores, “que no necesitamos, porque la DINAC cuenta con profesionales propios calificados para ese tipo de gestión”.
“Hay que cortar sin mayores contratiempos todos los tramposos servicios de mantenimiento que se adjudican a firmas privadas, y dejar que los profesionales de la aviación hagan sus trabajos, con lo cual se podrán cortar los gastos superfluos y con ello la pandemia de nuestra corrupción”, disparó Orué.