El padrastro de Juliette aparece en primera instancia como sospechoso de la desaparición junto con su mujer, la madre de la niña. Las averiguaciones deberían concentrarse sobre estas dos personas, coinciden investigadores. Foto: Youtube.com

Todos los caminos conducen a Roma. En mayor o menor medida, esta máxima se puede aplicar al rastreo del caso Juliette, quien lleva desaparecida desde el pasado 15 de abril, en medio de un halo de misterio aún indescifrable para los investigadores, que se han distribuido en tres frentes (Emboscada, Caacupé y San Lorenzo) en busca de evidencias que puedan conducir al esclarecimiento del caso, que para la Policía está etiquetado como de alta prioridad.

“La madre de Yuyú, Lilian Zapata, y el padrastro Reiner Oberüber, con seguridad pueden aportar mucha información para direccionar las investigaciones, pero lastimosamente hasta ahora no se ha logrado convencerles de la importancia de aportar datos claves y reales para facilitar el rastreo y el hallazgo de la niña”, afirmó este jueves un investigador privado abordado por La Mira.

La mujer se encuentra en carácter de detenida en el penal de mujeres “El Buen Pastor” de Asunción, donde enfrenta el cargo penal de violación del deber de cuidado y abandono, en este caso de su pequeña hija, afectada de una patología conocida como microcefalia, que le impide manejar el habla y el sentido psicomotriz, por lo cual su edad cronológica no coincide con su edad mental, entre otros rasgos destacados.

El padrastro de la nena está alojado en la cárcel de máxima seguridad de Emboscada, rodeado de reos de alta peligrosidad, donde también enfrenta los mismos cargos de su mujer y, al igual que la misma, no presenta señales de querer colaborar, afirmaron nuestras fuentes.

“Por suerte para la causa, contrataron los servicios de un abogado muy guapo”, señalaron vecinos indignados en referencia al doctor Oscar Tuma y su equipo jurídico, quienes sin pérdida de tiempo solicitaron pericias de los respectivos aparatos celulares de los presuntos sospechosos de la desaparición de Yuyú, y otras diligencias claves para descifrar el misterioso caso, que mantiene en vilo a la comunidad emboscadeña en especial, y a todo el país e incluso el exterior, de manera general.

“Esperamos la predisposición de las autoridades para facilitar al nuevo equipo de investigación los elementos necesarios para que se encamine adecuadamente el rastreo de la nena y muy pronto se pueda detectar su ubicación, para alivio de muchísima gente que hace oraciones y rogativas por esta inocente llena de alegría y amor que se ganó nuestros corazones”, expresó la ciudadana María Juliana Meza.

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