Los agentes lograron descubrir y destruir en terreno la impresionante cifra de 477.000 kilos de la droga, pero no cayó ningún narco. Un esquema de resultados repetido por la Senad, quien con su ministro Giuzzio también cosecha críticas en rol ocasional de contralor de fondos del covid.
Tras 10 días de incursiones permanentes dentro de la Reserva Natural Morombí, en el límite entre los Departamentos de Caaguazú y Canindeyú, agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) culminaron la operación denominada Caaguazú-Canindeyú II, que pretendía atacar los centros de producción de drogas establecidos por las estructuras del narcotráfico dentro de los bosques protegidos, señala el informe correspondiente emitido por la institución antinarcótica con rango de Ministerio.
Añade que la Senad, el Ministerio Público, la Fuerza Aérea, el Instituto Forestal Nacional (Infona), y la Comisión de Prevención, lucha contra el Narcotráfico y Delitos Conexos de la Cámara de Senadores, llevaron a cabo las intervenciones aéreas y terrestres que permitieron la identificación y destrucción de al menos 155 hectáreas de plantaciones de marihuana y 49 campamentos narcos preparados con toda la logística para el procesamiento de grandes volúmenes de cannabis.
Así también, fueron hallados e incinerados 11.830 kilogramos de marihuana picada, 36 prensas, 5 kilos de marihuana prensada y 165 kilos de semillas de la droga, que representan en total 476,8 toneladas de la “merca”.
Las incursiones contaron con el acompañamiento del fiscal Osvaldo García.
Según cálculos estimativos, con todas las acciones mencionadas, se anuló la circulación de al menos 476.830 kilogramos de marihuana lista, ocasionando un perjuicio económico superior a los 14 millones de dólares al negocio del tráfico de drogas.
“Este tipo de operaciones busca desalentar el continuo ingreso de estructuras criminales a las reservas naturales, que trae consigo el desmonte para la producción de marihuana”, expresa la información de la Senad, que no alude en ningún momento a detenciones de narcotraficantes o personas vinculadas a la producción.