Sectores populares se movilizan en demanda de comida por el centro de Asunción, mientras el gobierno informa que ya se ha ejecutado más de la mitad de los 1.600 millones de dólares prestados del exterior. «Dónde está la plata», se pregunta la gente.
En el marco de la segunda rendición de cuentas a la ciudadanía, que el observatorio popular considera como la lógica del absurdo, el viceministro de Administración Financiera del Ministerio de Hacienda, Oscar Llamosas, afirmó que de los 1.600 millones de dólares prestados para el pueblo de organismos internacionales, hasta el momento ya han sido 877 millones de dólares.
A través del sitio oficial de informaciones, mencionó que los millones sobrantes se encuentran en planes de ejecución del Ministerio de Salud y de otras entidades, así como el pago de subsidios y la continuidad del programa Pytyvõ en lo que resta del año.
Señaló que los recursos asignados a Salud Pública ascienden a 249 millones de dólares, de los cuales se han ejecutado 37 millones de dólares, y están en proceso de adjudicaciones licitaciones que bordean los 131 millones de dólares.
Médicos, enfermeras, auxiliares y personal afectado al servicio del covid han puesto contra la espada y la pared al Ministerio de Salud luego de que denunciaran por diversas vías la falta crítica de insumos sanitarios y equipos biomédicos, a más de salarios extras impagos y un ambiente de precarización humillante para la calidad de la atención a pacientes.
Con relación al componente de programas sociales y a los compromisos del Estado, Llamosas comentó que se han autorizado 534 millones de dólares para estos destinos, de los cuales se llevan ejecutados 505 millones de dólares.
Con relación a las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) y capitalización, fueron autorizados 64 millones de dólares, y asignados 61 millones de dólares, ejecutándose hasta el momento 52 millones de la misma moneda.
Expresó que para los subsidios de los servicios básicos fueron autorizados 62 millones de dólares, de los cuales se asignaron 48 millones y se ejecutaron 15 millones de dólares.
Aludió también al misterioso programa Pytyvô y afirmó que al principio se estableció un fondo de 300 millones de dólares, con una primera etapa de entregas culminada, destinándose para el efecto 195 millones de dólares.
Manifestó que el remanente de ese programa, que se encuentra en torno a los 105 millones de dólares, así como el remanente de otras acciones, fue destinado al programa Pytyvõ 2.0, que prioriza los sectores de frontera, principalmente ciudades del departamento de Alto Paraná.
El ministro de Salud, Dr. Julio Mazzoleni, expresó que en el ámbito de su competencia hay muchos desafíos en el proceso de compras, “que tienen que ver con la complejidad misma de los ítems que se requieren”.
Indicó que, en líneas generales, existen contratos en ejecución, otros procesos más avanzados a actualizarse, y procesos de adquisición que están en planificación.
Detalló que varios de estos procesos hacen alusión a equipos de protección individual, entre ellos 3 millones de batas que serán adquiridas a través del Acuerdo Nacional, y otros productos, como mascarillas, que serán compradas por la tienda virtual.
“Estamos comprando más de 10 millones de mascarillas de todo tipo, seguimos comprando equipos biomédicos. Tenemos 150 que están en proyecto, en licitación ahora mismo y lo propio que estamos llevando adelante, sobre todo en el área de insumos de laboratorio, donde tenemos un llamado de 250.000 muestras que nos van a permitir procesar el mismo número y poder seguir adelante con las estrategias de testeos y rastreos”, indicó el ministro Mazzoleni.
Se informó que el monto de los contratos en ejecución es de 15.009.979 dólares, y de los procesos de adquisición 130.682.596 dólares, con lo cual se tiene una inversión comprometida de 145.692.575 dólares, de un total asignado de 514.000.000 de dólares, entre otros informes relacionados a presupuesto, ejecuciones y proyecciones.
En la práctica, sus propios colegas médicos desmienten la certeza de estas cifras señalando que el sistema sanitario está a punto del colapso debido a la falta de camas para terapia intensiva, insumos, equipos e incluso pagos convenidos con el personal de blanco y administrativos de todos los hospitales, centros y puestos de salud de toda la república.
“Estamos al borde de una debacle sanitaria”, denunció días pasados la presidenta de la influyente Asociación Paraguaya de Médicos (APM), Dra. Gloria Meza, graficando la situación de desborde del personal de blanco y la crítica falta de capacidad del Ministerio de Salud para ofrecer respuestas eficientes, reales y oportunas.