Indignados arremeten contra la vivienda de la patrona brasileña en el centro urbano de Curuguaty, en una inédita manifestación colectiva que hoy tendría novedades con la declaración de un ex empleado de los Neukamp.
Este viernes deberá declarar ante la fiscalía de la ciudad de Curuguaty un ex empleado de la estanciera Janice Neukamp citado por el agente del Ministerio Público Rolando Ortega para una declaración testifical que busca elementos para incriminar a la mujer por atentar presuntamente contra los derechos humanos de los trabajadores paraguayos de su establecimiento productivo al prohibirles hablar en guaraní, uno de los dos idiomas oficiales del Paraguay.
De acuerdo a los datos, el ex empleado habría sido afectado también por la insólita prohibición, y aceptó declarar sobre el caso que le tocó experimentar con su ex patrona, quien no arrastra otro tipo de antecedentes incriminativos salvo el de mostrar odio aparente hacia el guaraní, a pesar de que el mismo idioma es hablado en gran parte del sur de Brasil donde residen familias originarias tupi-guaraní.
“Vamos a ver en qué termina esto, pero lo cierto es que no puede quedar en el opareí”, posteó este jueves un poblador de Curuguaty, al expresar dudas sobre la investigación de la fiscalía, que arrastra denuncias de sumisión a los políticos de la zona y a los solventes agroproductores.
“La justicia de Curuguaty actúa solo contra los pobres, ofreciendo blindaje a los poderosos, por eso creo que esto es solo una cortina de humo para tratar de tapar la situación, que por primera vez puso de pie a toda la ciudadanía en un hecho que enmarca el grado de patriotismo que tiene el pueblo, no sus autoridades”, tuiteó Gabriela Colmán, quien se declaró familiar de Julio Colmán, conocido político colorado de la zona que se puso en frente de una turba de exaltados pobladores para repudiar la actitud de la Neukamp y pedir la intervención de las autoridades correspondientes.
“El fiscal Ortega tiene que saber que estaremos pendientes de su investigación, y no vamos a permitir que transe como lo hace la mayoría de sus pares por acá, porque están en grave peligro nuestra identidad y derechos, en este caso de hablar abiertamente nuestro idioma oficial”, expresó por su parte Belén Ramírez.