Los invasores de Pindó participaron este jueves en la manifestación violenta registrada en Cruce Carolina, afirmaron pobladores que repudiaron la actitud de los supuestos sintierras, que por medio de la violencia buscan impunidad para ocupar predios privados y practicar la delincuencia.
Una agrupación radicalizada de personas que se victimizan para ocultar su perfil violento ocupa este jueves la franja de seguridad de la ruta internacional Asunción-Salto del Guairá, a la altura de Cruce Carolina, jurisdicción de Yvyrarovaná, departamento de Canindeyú.
Los supuestos campesinos sin tierra, conocidos en la zona como invasores de propiedades privadas, llegaron a cerrar por varias horas el paso de todo tipo de vehículos, entre ellos enormes camiones con cargas de granos y sus respectivos choferes, en una muestra de prepotencia que, afortunadamente, derivó en la intervención de la fuerza antidisturbios de la Policía asentada en Salto del Guairá, que logró despejar la ruta y garantizar el libre tránsito, en medio del temor generalizado por el peligro latente que representan los manifestantes.
“Vamos a tomar por asalto todos los vehículos que pasen por acá, especialmente a estos sojeros, hasta que se pudra su soja y les perjudiquemos, así como ellos nos perjudican a nosotros al robar nuestras tierras y apoderarse de la riqueza del país con la complicidad de las autoridades”, disparó por medio de un altavoz el líder de los “ocuparrutas”, Jorge Mercado.
Mientras vecinos del lugar y vehiculistas aguardaban la prometida llegada de la Policía, los manifestantes lanzaban alaridos amenazantes contra tirios y troyanos, apuntando veneno contra los productores brasileños (brasiguayos) de la zona, a quienes acusan de dejarles sin fuentes de trabajo y de discriminarles a la hora de convocar alguna mano de obra.
“Se manejan exclusivamente entre ellos, y están en nuestro país solo para enriquecerse y de paso abusar de nosotros con la ayuda de sus amigos del poder”, tiroteó otro manifestante en medio de la sorpresiva movilización que, supuestamente, tenía como objetivo hacer causa común contra el gobierno corrupto de Mario Abdo Benítez, en consonancia con las manifestaciones realizadas en varios puntos del país.
La llegada del contingente de uniformados antidisturbios fuertemente armados instaló tranquilidad momentánea al lugar, y persiste la amenaza de más violencia.
“Tienen que llevar detenidos a todos estos vándalos, que se especializan en crear conflictos y usar la violencia para generar temor y así erigirse en dueños y señores de la zona, como puntapié inicial para ocupar propiedades privadas y practicar impunemente todo tipo de delitos como el abigeato, la depredación de los bosques y la producción de marihuana”, señaló un indignado del lugar que pidió el anonimato por temor a represalias.
De acuerdo a datos que maneja la propia Policía, para mañana viernes los violentos aprestan otra manifestación con más hechos de violencia.