Los senadores de Frente Guasu presentan a la joven incendiaria como víctima y hacen apología de la violencia que busca un perfil político para un caso jurídico penal. A todo el bloque de izquierda nunca se le vio acompañando a presos comunes que están tirados sin causa abierta ni abogados en las cárceles del país.

Los senadores del partido de izquierda chavista Frente Guasu, Esperanza Martínez y Carlos Filizzola, rompieron por fin su silencio como representantes del pueblo para defender la causa penal que enfrenta la joven incendiaria Vivian Genes por su presunta participación en la quema de Colorado Róga el pasado 17 de marzo, cuando quedaron expuestos al fuego varios jóvenes que residen en el sitio perteneciente a la ANR, entre ellos varias personas con capacidades especiales, según la carpeta fiscal.

Tanto la Martínez, como Filizzola y todos los demás componentes de luguista Frente Guasu, sin embargo, no fueron vistos durante toda la pandemia acompañando a compatriotas enfermos o moribundos por falta de atención o insumos en los hospitales, pero fueron los primeros en hacerse presentes para ensayar una defensa mediática de los tres jóvenes detenidos y procesados por la quema del local republicano, incluidos Pedro Areco y Luis Trinidad, recluidos en una comisaría de Asunción.

Frente Guasu alega que en el caso de los jóvenes incendiarios existe violación procesal, específicamente la falta de pruebas o evidencias que comprometan la participación de los procesados en los hechos denunciados, entre ellos perturbación de la paz pública, producción de riesgos comunes, daño a cosas de interés común y daño a obras construidas o medios técnicos de trabajo.

“Vivian Genes está irregularmente apresada” en medio de una “grave aberración jurídica”, expresa Frente Guasu en su sitio virtual, y se dirige con los mismos términos a la causa de los demás acusados del incendio, registrado en el marco de una manifestación de protesta contra el desastre de gestión del presidente Mario Abdo Benítez, quien permanece en su cargo con el blindaje del cartismo.

“Denunciaremos estos actos condenables ante instancias jurisdiccionales nacionales, como también a organismos internacionales, así como el actuar corrompido de los órganos fiscales y judiciales que se encuentran controlados por el poder de la mafia, al servicio del cartismo y el adbismo”, afirma en un comunicado el Frente Guasu.

La reacción ciudadana no se hizo esperar.

“Hay que apoyar a estos jóvenes y defenderles de la mafia judicial que los condena por pedir terapias y medicamentos para los comunes. Esta jueza hurrera que dictó la prisión debería estar en el banquillo de los acusados en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados por inútil y venal”, comentó en su sitio social el indignado Edilberto Pedrozo.

Marcelo Torres se pregunta si el Frente Guasu opera de igual manera para los miles de presos que ni siquiera tienen causa abierta y están tirados en las cárceles, mientras Guillermo Santana postea: “Para apadrinar a delincuentes están listos estos de la izquierda caviar dirigidos por el terrorista Sixto Pereira, pero no se les ve dando ayuda a compatriotas que, también por culpa de ellos, mueren de covid en los hospitales públicos”.

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