Taiwán rompió el silencio y salió a acusar a Rusia de provocar el conflicto con Ucrania, poniendo en grave peligro la paz de la región y del mundo. Pide la unidad internacional para sacar a este país de los horrores de la guerra. (Foto: El Periódico).
El gobierno de la República de China (Taiwán) condena enérgicamente la invasión rusa de Ucrania en violación de la Carta de la ONU y se une a las sanciones económicas internacionales contra Rusia, señala la representación diplomática del país asiático en Paraguay.
A través de un comunicado a la opinión pública nacional e internacional, señala que el gobierno taiwanés censura de forma categórica la decisión de Rusia de iniciar una guerra en violación de la Carta de la ONU al invadir Ucrania y ocupar territorio ucraniano por la fuerza.
“Esta acción ha puesto en peligro la paz y la estabilidad regionales y mundiales”, señala el comunicado de fecha 25 de febrero del año en curso, en el cual también plantea la amenaza y el desafío más graves para el orden internacional basado en normas y el sistema de leyes internacionales que mantienen y protegen la soberanía y la integridad territorial de todos los países.
“Como miembro de la Alianza Democrática Mundial, la República de China (Taiwán) defiende firmemente los valores universales fundamentales de libertad, democracia, estado de derecho y derechos humanos”, alega el documento.
En otro momento, Taiwán “lamenta profundamente que Rusia, en lugar de resolver disputas a través de negociaciones diplomáticas pacíficas, haya optado por usar la fuerza y la intimidación para intimidar a otros. Para obligar a Rusia a detener su agresión militar contra Ucrania y reiniciar el diálogo pacífico entre todas las partes involucradas lo antes posible, el gobierno de la República de China (Taiwán) anuncia que se sumará a las sanciones económicas internacionales contra Rusia”.
Por todo lo que está ocurriendo en la zona de conflicto, “volvemos a pedir que se respete la soberanía y la integridad territorial de Ucrania”, apunta.
Taiwán se opone a cualquier cambio unilateral del statu quo por la fuerza o la coerción, y apoya el diálogo y la negociación pacíficos y racionales entre países relacionados en el marco del derecho internacional para resolver las diferencias.
“Taiwán continuará coordinándose estrechamente con los Estados Unidos y otros países de ideas afines para adoptar las medidas apropiadas a fin de liberar a Ucrania de los horrores de la guerra, así como restaurar, lo antes posible, la paz y la estabilidad en la región y el mundo”, recalca el comunicado.
Por otra parte, insistentes versiones no confirmadas colocan a Taiwán en el ojo de un presunto plan de ataque de China continental, como parte de la guerra de hostilidades practicadas desde hace décadas con mensajes abiertos de reivindicación territorial.
El sitio virtual Wikipedia señala que luego de la rendición japonesa, que precipitó el final de la Segunda Guerra Mundial, Taiwán fue evacuado desde el Imperio de Japón a la República de China. El gobierno de la República de China gobernó Taiwán y China continental desde 25 de octubre de 1945 hasta 1 de octubre de 1949, y a partir del final de este año, cuando se proclamó la República Popular China en Pekín, la República de China se mantiene solo en la isla de Taiwán y algunos archipiélagos menores.
En Taiwán se refugiaron en 7 de diciembre de 1949 alrededor de dos millones de chinos vinculados al partido nacionalista Kuomintang, que dominaba los órganos de poder de la República, y que han mantenido en la isla las instituciones de gobierno originalmente establecidas en el continente.