Parecería una foto de prontuario policial, pero Cardozo transita libremente sin ser molestado por la justicia, que incluso está a punto de premiarle con la impunidad. El otrora «mboriahumi» es, junto a su compueblano Nicanor, uno de los más ricos de Cnel. Oviedo.
Los ex ministros liberales Enzo Cardozo y Rody Godoy están a punto de liberarse penalmente de la causa que por vaciamiento del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) enfrentan ambos compueblanos, correligionarios y cómplices desde el 2014, sin que hasta el momento la justicia se decidiera a cortar la saga interminable de trampas jurídicas presentadas por abogados especializados en este tipo de artimañas que permiten a sus defendidos frotarse las manos aguardando la ansiada prescripción.
Mientras esto ocurre, millares de campesinos hambrientos y necesitados que han acumulado guarismos radicales de pobreza y de pobreza extrema, esperanzados en las dulces promesas de estos verdaderos pillos y peajeros empotrados en el MAG, aguardan justicia en medio de la desazón generada por las noticias de pronta impunidad para quienes son considerados culpables de la miseria rural.
Cardozo enfrenta no uno, sino dos acusaciones de vaciamiento de fondos del Estado destinados, en los papeles, al desarrollo de las empobrecidas familias campesinas, pero que, según la carpeta de investigación fiscal, han sido utilizados con otros fines, posiblemente para engrosar las cuentas corrientes personales y facilitar el enriquecimiento rápido de jueces, fiscales y líderes políticos facilitadores de impunidad.
El perjuicio patrimonial supera los G. 68.000 millones de guaraníes en la primera denuncia, y más de G. 3.700 millones en otra causa que igualmente coloca en posición de culpables a los ex ministros Cardozo y Godoy, quienes gozan de increíble impunidad y ostentan la corona de grandes señores en su natal Coronel Oviedo, a pesar de la gravedad de sus presuntos hechos penales.
El reciente blanqueamiento del también ex ministro luguista Rafael Filizzola por un supuesto desvío de 2.500 millones de guaraníes destinados al mejoramiento de las destartaladas comisarías del interior, ha reavivado las ansias de libertad por extinción de plazos de sentencia de autoridades comprometidas en actos de corrupción, entre ellos Enzo Cardozo, Rody Godoy y el también señalado de vaciador, Luis Ortigoza, procedente de la tierna cantera de corruptos liberales quien enfrenta orden de captura internacional pero que, según fuentes, estaría escondido en su natal San Pedro disfrutando de su riqueza malhabida.
“Todas estas causas se encaminan rumbo al opareí, no hay señales de reacción judicial, que por lo visto está muy contenta con la administración de justicia porque nada hace para repeler a los chicaneros y sí reacciona sin pérdida de tiempo cuando la víctima o el acusado es un simple Juan Pueblo acusado de robar gallinas”, postea en su sitio social el indignado José Luis Perdomo, en referencia al Poder Judicial paraguayo, ubicado como uno de los más corruptos del mundo.