Marito recibió otra vacunada, esta vez en Diputados, donde acusó una derrota dolorosa que compromete su proyecto de seguir con el desastre nacional, arrastrando a aliados opositores y mediáticos a golpes en serie por parte de la ciudadanía harta de ellos. (Foto: Diario Crónica).
Acudieron a las patrañas más infames para sacar de en medio a “enemigos” políticos que molestan al establishment acusado de vaciar el país, pero terminaron con una feroz cachetada propinada por el mismo pueblo a quienes alegan representar y de quienes han venido burlándose extendida y abiertamente con el único propósito de asegurar el continuismo y con ello el festival de robos, derroches y otros tipos de abusos de poder y autoridad que han hundido a la nación.
Paraguay se encuentra en una época histórica de carestías y necesidades multiplicadas en todas las áreas de su desenvolvimiento que golpean con fuerza desmedida a la ciudadanía, pero falsos mesías con representación ciudadana han preferido dar color y sonido al circo montado aviesamente en la Cámara de Diputados con la finalidad de destituir en primer plano a la fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez, como paso inicial para un proyecto de perversión política que apuntaba a dejar fuera del ruedo electoral al expresidente de la República Horacio Cartes como candidato a presidir la ANR en diciembre próximo, y a Santiago Peña como presidenciable para las elecciones de abril de 2023.
Así lo dijo en plena sesión de la “Cámara de la Vergüenza” el diputado Raúl Latorre, como explicación al por qué la bancada cartista se oponía al pedido de juicio político y rechazar el supuesto vínculo de la FGE con HC, que días después la diputada Rocío Abed se encargó de detallar con nombres y apellidos de intendentes y gobernadores afectados por investigaciones del mismo Ministerio Público criticado por la entente granítica conformada por el abdismo y el liberozurdismo, sin contar con los casos de peces gordos del crimen organizado que están con carpetas fiscales abiertas.
El resultado del “circo” montado en Diputados es de público conocimiento, y si bien el caso pasó al archivo, no tendrá igual destino el papelón exhibido ante la opinión pública nacional e internacional por parte de diputados y diputadas que ofrecieron un triste y lamentable espectáculo que pinta a cuerpo entero el bajo nivel profesional de quienes alegan orondos la representatividad de una mayoría evidentemente cooptada y víctima de estos verdaderos asaltantes del poder.
Ganó primeras planas de diarios y televisión del mundo el dedo medio exhibido con ostentación y soberbia por la diputada efrainista Celeste Amarilla y la basura verbal expuesta por la “doctora” Kattya González, quien alegó varias veces haber quemado pestañas para obtener un título de grado que, en esta ocasión, utilizó para patentizar su ruin incompetencia.
Soberana lección de democracia representativa han acusado quienes muy pronto volverán a salir a las calles a pedir votos, quién sabé con qué pretextos, con la única finalidad de continuar prendidos de la generosidad del Estado paraguayo, incluido el Ministerio Público por ellos satanizado que tarda en investigar la delincuencia institucionalizada instalada en el recinto parlamentario nacional, arteramente callada por sus verdaderos protagonistas.