El sistema informatizado de atención a pacientes donado por la República de Taiwán constituye un brazo de servicio práctico, rápido y eficiente cuya utilidad alcanza a los médicos y a la propia institución de salud.
El Sistema de Información en Salud (HIS por sus siglas en inglés), avanza en los establecimientos médicos de las regiones sanitarias del país.
En julio pasado se expandió a tres servicios, dos de ellos dependientes del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
Se trata del Hospital distrital de Alberdi (Departamento de Ñeembucú) y la Unidad de Salud Familiar Piquete Cué (Limpio).
El tercer establecimiento es el Hospital Central de las Fuerzas Armadas, de Asunción, que no depende del Ministerio de Salud Pública, según se informó.
Durante el año 2022, el HIS ha llegado a las 18 Regiones Sanitarias del país y ha sido implementado en 65 establecimientos de salud, llegando a un total de 130 centros de atención a la salud y duplicando de esa manera la cantidad de hospitales que utilizan el sistema, comparando al año anterior. Actualmente, más de 8.000 usuarios utilizan el sistema en su día a día y se ha logrado registrar más de 2 millones de atenciones sanitarias, de acuerdo a los datos.
Este proceso de transformación digital es encarado de forma conjunta entre el gobierno de la República de China (Taiwán) y el Ministerio de Salud Pública de Paraguay.
El objetivo del proyecto es modernizar el servicio de atención al público en los centros sanitarios de nuestro país, de forma a mejorar el esquema de gestión y, esencialmente, ayudar al paciente a que su estadía o espera para las consultas sea más práctica, rápida y eficiente.
“Agradecemos al gobierno de Taiwán por su solidaridad con el Paraguay, en este caso a través del Sistema de Información en Salud (HIS), que ayuda no solo al médico tratante sino al paciente y a la institución o local de salud, que de esta manera pueden brindar una atención más digna”, comentó a La Mira una médica pediatra del Centro Materno Infantil de Trinidad que, al igual que los demás centros sanitarios del país, hasta que sobrevino el proyecto taiwanés debían convocar a las consultas de forma oral, que en casos de aglomeración o gran cantidad de personas se convertían en gritos de los nombres de las personas que debían entrar a consulta.