La prensa amiga de Marito se encargó de relativizar las 10.000 personas presentes, a pesar de la lluvia, en la manifestación contra la ideología de género en las escuelas. Una ponchada de plata está en juego contra los intereses de los globalistas locales.
El proyecto de ley que busca suspender el acuerdo de financiación de 38 millones de euros de la Unión Europea para el programa de transformación educativa del Paraguay expone las poderosas razones que maneja el gobierno, aliado a la oposición y la prensa alquilada, para instalar la perversión de género en las escuelas y de esa manera proceder al mandato globalista de destruir a la familia normal degenerando a sus niños y adolescentes.
El argumento utilizado en esta ocasión por dos senadores liberales (Abel González y Blas Lanzoni) y el parlamentario colorado cartista Enrique Riera (todos los legisladores oficialistas y opositores apoyan la degeneración educativa), coincide con los reclamos de padres de familia y organizaciones provida de todo el país, que hace días se congregaron en Asunción en una multitudinaria manifestación contra los planes malvados del gobierno a través del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), entre otras instituciones “pro-gay” y “pro-aborto” como el propio Ministerio de la Niñez y la Adolescencia (MNA) y un enjambre de Organizaciones no Gubernamentales (ONGs) que lucran con el futuro de los niños paraguayos.
El estudio del original pedido deberá ser analizado y determinado, entre otras comisiones del Congreso nacional, por las de Educación, Equidad y Género, Derechos Humanos y De la Niñez, Adolescencia y Juventud, dominada por legisladores globalistas que exponen a cielo abierto su intención de someter la infancia y la familia paraguaya a los perversos planes del Nuevo Orden Mundial, donde ejerce superior protagonismo la ideología de género con variables tales como el “orgullo gay” y “la elección de sexo”, entre tantos otros.
“Nuestro país siempre se ha movido al compás de la plata externa, en este caso jugosos euros que posibilitarían el enriquecimiento rápido y fácil de muchísimas autoridades y oenegesistas a costa del futuro de nuestros niños y adolescentes, que de esta forma son tirados a los leones por estos traficantes de la dignidad humana”, dispara este Soledad Garay Mernes, quien se presenta como activista provida y familia.
Se descuenta la oposición que tendría en Comisiones el proyecto de ley, a sabiendas de la posición radical asumida por autoridades nacionales y referentes de ONGs desde el momento que fueron advertidos acerca del multimillonario respaldo financiero y la posibilidad abierta de hacer negocios sobre la dignidad de los niños, de las familias paraguayas y del propio país.
Fiel a su perfil siempre ambiguo y controversial, el presidente de la República Mario Abdo Benítez hace alarde en sus recorridos electorales del “amor a la gente”, y por otro lado se presenta como el principal impulsor del proyecto de degeneración infantil y destrucción familiar a través de sus ministros, y abyectos distribuidos en ONGs y la prensa.