Silencio por la toldería. Como siempre, los agentes llegan «el día después» porque los narcotraficantes huyeron sin dejar rastros, con lo cual los operativos se reducen al mínimo porque «matan el perro pero no la rabia».
La Senad se encuentra encarando operativos en lugares alejados del interior en la lucha contra las drogas. Una de las incursiones se realizó en la zona de Ypehû, departamento de Canindeyú, donde agentes pertenecientes a la oficina de Salto del Guairá destruyeron 3 campamentos narcos y anularon más de 5 toneladas de marihuana.
Unos 700 kilos de marihuana prensada estabandistribuidos en 700 paquetes y en el lugar se encontraron otros 4.400 kilos de marihuana picada.
Todo lo eliminado alcanzó 5.100 kilos, según el informe oficial.
En cuanto a los insumos utilizados para la produción de la droga, fueron encontrados 8 prensas de metal, 3 zarandas y 8 gatos hidráulicos que también fueron incinerados durante el procedimiento encabezado por el fiscal Néstor Narváez.
De acuerdo a los datos, la totalidad de la “merca” debía ser destinada al mercado brasileño, donde el precio de comercialización supera por varios dígitos a lo que paga en Paraguay, aunque el riesgo de caer en manos de antinarcóticos es mayor.
La Senad, sin embargo, nuevamente no hace alusión en su informe a la existencia de narcos detenidos, como lo cual matan el perro pero no la rabia, afirman posteadores en las redes sociales que hacen seguimiento de las movidas de la institución antinarcótica paraguaya, tradicionalmente foco de críticas por falta de resultados en la alta cúpula del narcotráfico sino todo lo contrario, con decomisos de droga cada vez más frecuentes y sustanciosos en mercados de ultramar.