La senadora liberal amiga de los medios deja ver su silueta confundida con el majestuoso entorno en las faldas del Polo Norte, adonde fue a una reunión de mujeres, similar a las realizadas en cualquier país de Sudamérica. Ola de cuestionamientos genera el tour pagado por el pueblo.
Un tour con el rótulo de “viaje oficial” por el norte de Europa permite a la senadora liberal efrainista Celeste Amarilla disfrutar de los paisajes de ensueño en la lejana Islandia, adonde fue supuestamente invitada por la organización de un foro mundial de mujeres interesadas en la lucha contra la igualdad, entre otros objetivos que en nada difieren de convocatorias similares realizadas en esta parte de América habida cuenta del libreto común manejado en el contexto de la Agenda 2030 y el globalismo.
Celeste no tuvo empacho en recibir los millones del Estado paraguayo para emprender el extenso recorrido adonde acudió sin oposición acompañada de un familiar.
Lo llamativo en este caso es que la operadora efrainista amiga del abdismo y estrella de los holdings mediáticos puso en práctica la misma dinámica que en su momento realizan sus colegas a la hora de emprender algún destino turístico etiquetado como oficial, con plata pública que, según había dicho Celeste en varias ocasiones, debería ser destinada a cosas útiles como un mayor presupuesto a la salud, educación y seguridad.
Como es “norma” ante el menor movimiento de cuerpo y de palabra de la legisladora de la oposición, medios amigos se hicieron eco del “viaje de trabajo” de Celeste a Islandia, pintándolo de rosa y omitiendo arteramente el fondo de vergüenza que debería tener el caso, más aún proviniendo de la misma senadora mimada de los medios que acostumbra utilizar el mismo holding aliado para disparar tóxicos verbales y orondos descalificativos contra adversarios políticos no alineados a la rosca que perdió las elecciones de abril y de la cual ella oficiaba de protagonista acérrima.
“Merienda Celeste escolar” satiriza una indignada en las redes sociales tras cuestionar a la senadora por la denuncia de supuesto rapiñaje de fondos para la alimentación de niños durante el gobierno de su amigo Marito.
“Oscura amarilla y sus paquitos de Vierci boys”, señala otro indignado social tras opinar que a nadie le importa este tipo de propaganda gratis para una legisladora acusada de corrupción “que se pasea por el mundo con nuestros impuestos”.
“Pobres islandeses, no se merecen otro dolor”, expresa Alan Robles en referencia al momento críticamente delicado del país europeo azotado por terremotos y erupciones volcánicas.
La repulsa también alcanza al propio Congreso Nacional que es objeto de críticas y burlas por conceder los millones para el viaje sin oponer resistencia.
“Esperamos que al retornar nuestra viajera vip brinde detalles y explique pormenores acerca de su viaje, específicamente detalles de resultados y si algo de lo tratado en la ocasión será de utilidad para las mujeres paraguayas que, ella lo sabe muy bien, se niegan a someterse al Nuevo Orden Mundial”, comentó en su red social Alejandra María Encina, en coincidencia con decenas de ciudadanos que exigen cuentas e informes claros a Celeste Amarilla más que fotos vacacionales para las páginas sociales de los medios amigos.